Fiesta del Orujo. Potes, Cantabria. Segundo fin de semana del mes de noviembre.
Potes es una localidad cántabra de la comarca de Liébana que es célebre por sus tradiciones, una de ellas, probablemente la que más suena fuera de la comunidad es la Fiesta del Orujo, que se celebra todos los años en la segunda semana del mes de noviembre. Normalmente, los días grandes son los del fin de semana más cercano, el sábado y el domingo.
La relación de Potes y de toda su comarca con el orujo es antigua. Se sabe que en la Edad Media, los monasterios de la zona ya producían un orujo lebaniego obtenido de una parte de la cosecha de la viña.
En su fiesta, los lebaniegos votan todos los años una ‘alquitara de oro’ para galardonar la marca de orujo con mayor calidad y a un orujero mayor, sí, como lo lees, entre una serie de figuras representativas de la sociedad española que durante un año lleva ese título. Cantantes, presentadores de televisión, gente del famoseo, llevan el nombre de Potes a los medios.
Las marcas de orujo lebaniego son algo menos de una decena, que sostienen la fiesta y que luchan todos los años por ver reconocida su producción con el premio de ostentar la preciada alquitara de oro.
Pero bueno, esa es la parte oficialista, la parte seria de la fiesta, lo que tal vez te interese es la celebración popular en sí.
¿En qué consiste? pues, en lo que se refiere al licor, en una destilación de licor de orujo ante el público congregado en la plaza principal de Potes y la correspondiente degustación de orujo por las calles y plazas de la localidad.
Todo comienza con un protocolario encendido de alquitaras, los dispositivos con los que se destila el orujo tradicional.
Los lebaniegos intentan transmitir con estos actos el valor y la calidad del orujo local y para llevar conocimiento a esas muestras públicas las hacen acompañar de actividades de divulgación, charlas, coloquios y de encuentros folclóricos que dicen mucho de las tradiciones de la comarca y del empeño de sus gentes por defenderlas, darlas a conocer y promocionarlas. Algo que les ha servido para considerar a la fiesta como de interés regional. Por algo será.
En la Fiesta del Orujo de Potes, hay algo más que da un sabor genuino y especial a la fiesta. Por ejemplo, los vecinos salen a desfilar con sus trajes típicos, como lo hace el cortejo que acompaña al orujero mayor, con toda su parafernalia.
También hay un mercado de productos naturales y tradicionales de la tierra, cursos de cocina públicos, se organiza otra degustación pública que alcanza a la elaboración de un cocido liebaniego, pero también a toda la colección de postres locales, especialmente el conocido flan de orujo, para rematar.
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Si te apuntas a festejar la Fiesta del Orujo de Potes, toma nota: Hostal la Torre, en la Avenida de los Castros, 53, y la Pensión Madrid, precisamente en la calle Madrid, 21, ambas localizaciones en el centro de la capital cántabra.
El orujo hace fiesta en Potes.
